
Parece que hay mucha gente entusiasta de Mafalda en
la comunidad. Para esos, pero especialmente para los que no
la conocen y aún están a tiempo, he estado investigando un
poco y descubierto algunas cosas que yo tampoco sabía.
Por ejemplo, que la tira se inició el 29 de septiembre de
1964 cuando Mafalda tenía supuestamente 6 años y la última
historieta se publicó el 25 de junio de 1973, contando nuestra
protagonista con ocho. El dato de la edad me sorprende un
poco porque físicamente yo siempre he pensado que nuestra
heroína no pasaría de los 4 añitos. Esto no deja de ser un alivio
ya que para la edad que imaginaba la niña era un poco demasiado
resabiada y contestona.
Se estima que los 10 libros oficiales recopilatorios han vendido hasta
ahora unos 20 millones de ejemplares sólo en castellano, aparte de
las antologías “10 años de Mafalda” y “Toda Mafalda” y las múltiples
versiones en otros idiomas. En realidad originalmente iba a ser una
historieta para promocionar una nueva línea de electrodomésticos
llamada Mansfield, pero la campaña nunca se hizo y las ocho
tiras preparadas quedaron guardada
s en un cajón hasta que Quino
rescató el personaje para la revista bonaerense Primera Plana.
El joven aspirante a dibujante se llamaba, y se llama, Joaquín
Lavado, un hijo de inmigrantes andaluces en Argentina que
sólo pudo terminar la primaria y que perdió a sus padres antes
de los 15 años.
Para mí, Mafalda es la personificación de un cierto espíritu
contestatario que muchos llevamos dentro, propensa a filosofar a
partir de cualquier hecho cotidiano y de la sociedad que le rodea.
Representa a la gente inquieta por el devenir del mundo y que quiere
hacer algo para cambiarlo, aunque sólo sea pensar en él de un
modo crítico. Tiene una mascota, la tortuga Burocracia, le gustan
los Beatles y odia a muerte la sopa. Suele poner a sus padres en
aprietos cada vez que les hace una de sus preguntas terriblemente
comprometidas.
Felipe
Este es el tontorrón del grupo. Es un año mayor que los demás
pero sus inseguridades le convierten en el personaje
más angustiado e inseguro. Es tremendamente fantasioso,
sobre todo cuando esa fantasía le sirve para no hacer lo que
le toca. Su filosofía de la vida se resume en la frase “no dejes
para mañana lo que tengas que hacer hoy... desde mañana mismo
empiezo..." o "la voluntad debe ser la única
que cuando está desinflada necesita que la pinchen".
Manolito
Bruto como él sólo y materialista impenitente, es el hijo del tendero
del barrio. Se podría decir que, por ideas y por actitud ante la
vida, representa a la derecha económica. Curiosamente se apellida
Goreiro, apellido claramente gallego, por lo que podría personificar
un cierto tipo de próspera pero rácana emigración económica
en Argentina. Sus máximas son: "Nadie pueda amasar una fortuna
sin hacer harina a los demás" y "se habla mucho de depositar
confianza, pero nadie dice que interés te pagan".
Susanita
Cotilla hasta el paroxismo, representa a la derecha social.
Se lleva fatal con Manolito aunque yo creo que ideológicamente
están condenados a entenderse. De mayores yo les veo casados
y con muchos hijos, dueños de una cadena de supermercados,
pero él la engaña con otra porque resulta que Susanita sólo se
preocupa de las reuniones con sus amigas, Cuqui y Laurita, la que
está separada del industrial Peláez, si mujer, ese q
ue tenía tres fábricas
pero se las jugó al póker una noche loca…
Miguelito
Su inocencia se ve contrastada con una maldad episódica muy agresiva.
Vive en un mundo aparte hecho por él mismo a su medida, sin
preocuparse demasiado de la realidad. Utópico como ninguno, está
siempre lleno de buenas intenciones. "La vida no debiera echarlo a
uno de la niñez, sin antes conseguirle un buen puesto en la juventud".
Libertad
Representa al ala izquierda de Mafalda. Es la mas pequeña del grupo,
tanto en edad como en estatura y le revienta la gente alta. Además le
gustan las cosas sencillas lo que supone una contradicción con su propia
personalidad, totalmente enrevesada: "A mi me gusta la simplicidad de
la gente simple. Yo soy simple pero no es precisamente por eso que
me gusta la gente simple, sino por razones mas simples..."
Guille
Es mi favorito después de Mafaddita, como él dice. Si actitud es,
para mí, la más acorde con su edad: le gusta pintar la paredes,
jugar con la tierra de las plantas, ensuciarse ("¡Mecacho! Hazta
ahoda pada lo único que tengo poded adquisitivo ez pada la mugre.")
y sobre todo darle al chupete con fruición, sobre todo cuando se pone
nervioso.
Los padres
En palabras de la protagonista, sus padres son de clase
mediaestúpida. Ella, que se llama Raquel, es la típica mujer
que abandonaba los estudios al casarse, muy consciente de
su realidad cotidiana pero a la vez resignada a su destino
El padre, oficinista típico, es un buen hombre, siempre preocupado
por el dinero que aporta a la familia. Amante de las plantas, las
hormigas son su peor enemigo. Ambos son relativamente abiertos
de mente aunque intentan como pueden mantenerse en su papel
ante unos hijos demasiado sabiondos.